El inicio de la Copa América 2021, que tiene como anfitrión al país de Brasil, trajo consigo el incremento de contagios por COVID-19. El pasado lunes 14 de junio, el Ministerio de Salud Brasilero notificó al menos 41 casos de contagios, de los cuales 31 lo constituyen jugadores y miembros de las selecciones y el resto lo conforman parte del cuerpo de empleados contratados para asistir directamente este evento.
Inicialmente, un día antes de la jornada inaugural del torneo, la delegación de Venezuela había anunciado la afección de 13 miembros de su selección. Asimismo, Bolivia reportó al menos cuatro casos positivos y, posteriormente, Colombia detectó dos casos en su equipo, siendo un asistente del seleccionador Reinaldo Rueda y un fisioterapeuta.
De igual manera, según lo expuesto en el comunicado emitido por el máximo organismo de salud pública de Brasil, se han llevaron a cabo alrededor de 2.927 pruebas PCR entre los distintos miembros de las delegaciones que participan en este torneo, junto al personal que trabaja en la asistencia del mismo.
La Confederación Sudamericana de Fútbol, CONMEBOL, se ha visto fuertemente criticada ante la realización de la edición número 47 de este torneo, debido a la planificación apresurada con la cual se le confirió la consumación de dicho evento al país de Brasil, el cual acumula casi 500.000 muertes producto del virus y la alarmante situación sanitaria.